Danson de récord en su partido 200 y aviso de Alemania

En la jornada de ayer del Vitality Hockey Women’s World Cup, el mundial femenino de hockey que se está disputando en Londres, 10.500 personas vieron en directo el partido internacional número 200 de Alex Danson, la capitana y estrella inglesa que, con su gol, igualó el récord goleador combinado de Inglaterra y Gran Bretaña. Pese al gran ambiente y el buen juego, esta vez sí, desplegado por Inglaterra, un gol de Estados Unidos combinado con una gran defensa americana impidieron que la fiesta fuera perfecta, y el partido acabó en empate a un gol.

Empezaron avisando los Estados Unidos, con un penalti córner en el primer cuarto que obligó a Maddie Hinch a lucirse para no empezar otra vez por debajo en el marcador. Las inglesas despertaron en el segundo cuarto, con hasta cinco disparos, sin mucho acierto. Se acercó Townsend, pero su remate forzado tras un rebote dio al poste, en la única jugada que inquietó realmente a Briggs.

Alex Danson, posando con la copa del Mundial antes de la competición / GettyImages

En la segunda mitad Inglaterra empezó como un ciclón. Tras avisar en un penalti córner, bien detenido por Briggs, Alex Danson protagonizó la jugada del partido. Recogió la bola en banda derecha, casi a tres cuartos de campo, y arrancó a correr esquivando americanas. Llegó al área por el centro, recortó hacia la izquierda y mandó un potente revés a la madera, inalcanzable para la guardameta. Era su gol número 115 con las selecciones inglesa y británica, igualando el récord que tenía en solitario Marjorie Pollard.

Cuando parecía que la fiesta de Inglaterra y Alex Danson serían la tónica por el resto del partido, Erin Matson recibió un pase sin marca por banda izquierda, entró al área y batió sin oposición a Maddie Hinch con un potente disparo al primer palo. A partir de aquí se fueron sucediendo los ataques ingleses, con protagonismo por la misma Danson y Sophie Bray, aunque muy bien defendidos por una defensa americana que llegó ya a Londres, tras estar desaparecida el primer partido ante Irlanda.

Tras el partido Sophie Bray reconoció a HockeyESP que «ha habido ocasiones para ganar el partido, pero ahora ya no se puede cambiar el resultado. Tenemos que aceptar el empate. Puede parecer una mejora respecto el primer partido pero no hemos cambiado realmente nada, salimos a ganar y a jugar por nuestras compañeras, quizás hoy a sido un partido más abierto y esto lo ha hecho diferente al de India».

En la misma línea apuntaba Danny Kerry, entrenador de las inglesas. «No estoy muy seguro que haya habido la mejora que aparenta en el juego inglés, fueron dos partidos muy distintos. India defendió muy atrás, sin intentar jugar para nada a hockey, por lo que acaba siendo un partido mucho más lento, y Estados Unidos siempre plantea partidos más atractivos, con más espacios. Dominamos a India y no ganamos, seguramente no hemos empezado bien ante Estados Unidos pero hemos hecho unos muy buenos tres cuartos después por lo que, como entrenador, estoy contento con mi equipo. Tenemos que mejorar un poco el ritmo y en nuestro último tercio de campo, aparte de eso, estamos muy bien».

Sobre el hecho de tener que jugar muy probablemente la ronda de octavos, Kerry aseguró que «sabíamos que todo era posible, ya que el ranking está basado no en nuestros resultados sino en los resultados de los equipos de hace dos años. La realidad es que estamos aún en construcción pero estamos jugando muy bien. Los rankings son irrelevantes, todos nos podemos ganar a todos, excepto quizás a los Países Bajos».

Erin Matson, la goleadora ayer por Estados Unidos, se mostraba muy satisfecha tras el partido. «Teníamos esperanzas de lograr una victoria, pero estamos muy contentas por el partido y el resultado. Ahora debemos pensar en India el domingo, donde nos jugaremos la presencia en octavos de final. He felicitado a Alex Danson por los 200 partidos, su golazo y su récord, pero nuestro objetivo era la victoria. Tras su gol, hemos buscado empatar para después ganar, he marcado el empate y eso es bueno, porque no nos hemos hundido tras recibir el gol. Contra Irlanda nos hundimos con su primer gol, y hoy no ha sido así, es una gran mejora».

Alemania se impone a Argentina y avisa a España

Alemania, el próximo rival de España en el Mundial, se impuso a una Argentina débil en defensa y demostró, con su segunda victoria, que es uno de los equipos más fuertes en la competición. Las alemanas tendrán suficiente con un empate ante las Redsticks para asegurar su primera posición en el Grupo C.

Empezó el partido con gol de Alemania, obra de Hannah Gablac, aprovechando un despiste de la defensa de las Leonas. Una jugada larga de Die Danas en el área de Succi, en que ninguna defensora pudo tocar la bola ni incomodar a las delanteras. Justo antes del primer cuarto empataron las albicelestes, con un penalti córner desviado por Flor Habif en el que además las alemanas perdieron su vídeo.

El segundo cuarto fue una muestra más del poderío de una Alemania que funciona como un bloque: bien ordenado, sin fisuras en defensa y con poderío ofensivo representado por la estrella de su ataque, Charlotte Stapenhorst. La joven delantera germana marcó dos goles en ese periodo, que la colocan como máxima goleadora del campeonato de momento con tres. El primero, aprovechando un rebote de Succi a una buena jugada de Elisa Gräve. El segundo, tras recibir un buen pase en el área, proteger correctamente la bola y girarse con un remate potentísimo directo a la red de Succi, uno de los mejores goles de lo que llevamos del campeonato. Antes del descanso Paula Ortiz marcó el segundo de Argentina, culminando una buena jugada por banda derecha de las de Corradini.

En el segundo tiempo no se movió el marcador, aunque hubo ocasiones para ambos equipos. Argentina demostró sobradamente su gran calidad individual, y ese es su principal problema: pocas veces juegan combinando, en equipo, aunque cuando lo hacen sus jugadas son letales. Alemania mantuvo bien el bloque, e incluso dominó en el último cuarto, acercándose al cuarto gol y avisando a España de que el último partido de su grupo será, muy probablemente, el más difícil.